Hangzhou: la Flor de Loto (2)

Continuando con la historia que abrí en otro post anterior, esta vez puedo comenzar con una sorpresa muy agradable ¡EL LOTO ESTÁ NACIENDO!. Si, esa semillita china que puse en agua el día 3 de agosto, por fin se ha decidido a salir del cascarón 13 días después.
Como ya había pasado el periodo de tiempo que había leído por Internet, me decidí a coger otra de las semillas de mi stock que conseguimos en Hangzhou, hacerle un pequeño agujero en la carcasa par que entrara el agua en la semilla más rápidamente (según instrucciones populares) y ver si teníamos más suerte. Pero visto lo visto, no es necesario. No obstante, con el experimento en marcha, veremos si ese pequeño agujero acelera el proceso de nacimiento de esta segunda semilla.

En cualquier caso, dejo por aquí algunas fotografías de lo que estoy contando para poder seguir con mayor emoción todo el proceso...

El 13 de agosto, como he comentado, cojo una nueva semilla para tener un par en proceso. En la siguiente imagen vemos la semilla aún si haberla metido en agua (izquierda) y la que lleva 11 días ya en el bote de cristal.

La semilla de la derecha se ha llenado de agua y ha aumentado el tamaño al doble. Pero este proceso fue algo menos llamativo que el que podemos ver ahora con la nueva semilla porque en el momento de ponerla en el bote con agua, su tamaño era similar, aún estaba verde.
Las que he guardado han mermado como la que vemos a la izquierda, poniendose la cáscara muy dura. Sin embargo, esto no ha sido ningún inconveniente, ya que al ponerla en agua, al día siguiente apareció con este tamaño:


Y dos días después, su compañera con 13 días de gestación, comienza a abrirse al mundo, asomando una pequeña ramita por uno de sus vértices que crecerá rápidamente.
Aquí la vemos con más detalle:


Sin duda, una agradable sorpresa. Ahora solo queda preparar el pequeño estanque, una maceta muy grande, con tierra de estanque y otras cosas que ya había comprado y tengo preparadas. No se si durará mucho o durará poco, pero es emocionante pensar que estos "recuerdos" de China están cobrando vida.

Actualización 16/08/09

La semillita 24 horas después. Ya la he tenido que cambiar a un bote de cristal más alto porque lleva un ritmo frenético. Me he gastado algo más de 700 Yuanes en una maceta alta y amplia, tierra para estanque, calentador para que esté a 20 grados, un filtro para el agua, antialgas... si alguien quiere colaborar en el proyecto "El Loto de Hangzhou" que lo diga ;). Esta planta me está dejando en números rojos, pensé que los gastos de China habían terminado...


Si os fijáis, ya tiene una segunda ramita en marcha que seguro crecerá igual de rápido. La segunda semilla aún está durmiente pero todo se andará.
Os mantendré informados.

Actualización 08/07/09

Bueno, después de todo este tiempo hay mogollón de novedades. Entre ellas que la primera semilla de loto que vemos en las fotos anteriores, ya le han crecido 3 hojas completamente, la madre (o sea la primera) se está muriendo, o sea, no se ha abierto (no se por qué) y está en camino una quinta hoja que crece al mismo ritmo: unos 6 o 7 cm por día. La verdad es que es tremendo.
Aquí lo podéis ver en una foto que hice al pequeño "estanque" acondicionado el día 19 de agosto. Está recien plantada (por eso el agua está un poco turbia) y se ve la ramita (que ahora está a punto de secarse) intentando alcanzar la superficie. Como podéis ver hay más de 20 cm de agua y sigue creciendo.


Pero esto ya pasó y 10 días después, el 29 de agosto ya teníamos 1 hoja completamente abierta, otra que ya ha tocado la superficie y la "madre" que sigue sin abrirse (a la izquierda)...

El 31 de agosto la cosa estaba así...


A día de hoy ya tenemos 3 hojas abiertas y una cuarta en camino que le debe quedar muy poco para tocar la superficie. Cuando pueda adjunto la foto.

En cuanto a la segunda semilla, fue un poco más tardía. Le costó 15 días en salir (27 de agosto), pero muy vigorosa, ya que nada más abrirse brotó con un montón de ramas como podemos ver aquí:


De todas formas fue peor que saliera con tanta fuerza, porque parte de esos pequeños tallos se han enredado de tal manera que no la están permitiendo crecer normalmente y hoy, 8 de septiembre, aún tiene ese "arco" formado y parece que no sale. Aunque la naturaleza es sabia y ha salido un tallo por otro lado.
La he plantado en una maceta mucho menor para hacer otro experimento y sin calentador de agua. Y es que tener un bidón como el otro para moverle es muy incómodo. A ver si pueden sobrevivir en poca agua (15 cm) y a temperatura ambiente.
En fin, el 31 de agosto estaba así; el bote mide 14 cm. Cuando pueda pego una foto de su ubicación actual y como va creciendo...

Ambiente PRE y POST eclipse

EDITADO: se han sustituido los vídeos por otras versiones más lentas, a 3 fps

Durante un eclipse total de Sol, los momentos previos y posteriores a la fase de totalidad suelen, a veces, menospreciarse ya que "lo único" que podemos observar es como al Sol se lo "va comiendo" La Luna poco a poco... todo esto mirado a través de unas gafas protectoras, claro.

Es cierto que ya cerca de la totalidad nuestros ojos detectan como ha habido una ligera disminución de la luz ambiental y una extraña pérdida de contraste que le da un caracter "plomizo" a la escena que estamos viendo.

Sin embargo, la pérdida de luz es mucho más acusada de lo que podemos notar, ya que nuestros ojos se van adaptando a la pérdida paulatina de dicha luz y casi no nos damos cuenta hasta los últimos minutos previos a la totalidad. Una cámara reflex puesta en modo manual y sacando fotos a intervalos de pocos segundos y con la misma velocidad de disparo sí que puede mostrar ese cambio de luminosidad de forma más clara.

Los siguientes vídeos están montados a partir de fotos de este tipo sacadas a intervalos de 30 segundos (el primer vídeo) y 15 segundos (el segundo) y animados a 3 fotogramas por segundo. Es decir, 90 y 45 veces (respectivamente) más rápido que en la realidad.

AMBIENTE PRE-ECLIPSE:

124 fotos en total

AMBIENTE POST-ECLIPSE

63 fotos en total

NOTA: Desgraciadamente, a los 10 minutos de acabar la totalidad la lluvia nos sorprendió de forma contundente por lo que tuve que cortar la secuencia.


Ya en la guagua, al refugio de la lluvia

Shanghai

Tal vez la ciudad mas impresionante que ha visitado haya sido Shanghai. No quiero decir con esto que sea la que mas me gustase, pero si la que mayor impacto me ha causado por su arquitectura y el caos de su tráfico infernal.

La imagen de un país con pasado comunista y que se define socialista no se asemeja a la imagen de capitalismo extremo que ofrece esta ciudad que actúa como puerta de entrada a China. Los rascacielos, las autopistas a distintas alturas y su tráfico caótico, de auténtica locura, contrastan con algunas islas de paz invadidas por los turistas extranjeros y nacionales que no paran de hacer fotos... como nosotros.

Un paseo por el río nos permite la comparación entre los edificios mas clásicos y la tremenda velocidad de crecimiento hacia arriba de las construcciones modernas. "Shanghattan" como lo llaman los lugareños se merece la comparación con la otra gran ciudad de rascacielos, pero quien ha visitado ambas se decanta por la ciudad de oriente en la comparativa.





Lo mas impresionante no es lo que hay hoy, sino lo que habrá en el futuro. 16 millones de personas son "shanghainesas" y la ciudad no para crecer. Será interesante volver dentro de diez años, a ver que ha cambiado.

Juanjo

Animación fases parciales del eclipse

Ya sabemos que no tuvimos mucha suerte en la totalidad del eclipse, sin embargo tuvimos muchas oportunidades de ver las fases de parcialidad entre el primer contacto y el segundo. Prueba de ello es esta animación que he logrado realizar a partir de 394 fotogramas desde la Canon EOS400 y el pequeño Meade ETX70 sobre esa cuña ecuatorial que me construí y que ya la he nombrado anteriormente. Se portó como un campeón, ¡Enhorabuena ETX!.

La verdad es que deja bastante que desear, pero es que era muy complicado. Las nubes iban y venían, había que realizar constantes variaciones en el tiempo de obtención de imágenes en la cámara, otra veces eran tan gruesas que podían salir incluso sin filtro... así podemos ver que algunas fotos son más claras y otras más oscuras, pero aproveché bien los momentos en los que el Sol se dejaba fotografiar y hay algunas que a mi me parecen muy buenas.

Casi al final, justo en el momento de la totalidad se hace un silencio visual tremendo, esa nube que nos tapó el anillo, las perlas, la corona y todo lo demás se quedaría contenta. Después de los seis minutos y medio la nubecilla pareció aburrirse y se fué a por agua mientras nosotros podíamos hacer alguna imagen después del tercer contacto. No tardó mucho en llegar cargada de agua y la dejó caer toda de golpe, parecía que no había llovido nunca. Recogimos los equipos lo antes posible y nos subimos al bus y volvíamos a Shanghai, mientras limpiaba el equipo y nos quedábamos con ese sabor típico de China, el agridulce.

Esta es la animación desde Youtube, con una calidad no muy buena por la compresión y el tamaño, pero puede apreciarse con claridad.

A pesar de todo, me siento bien por haber logrado al menos esto. Se que mis compañeros también obtuvieron imágenes muy buenas, que requerían mucha destreza dadas las circustancias.

[Publicado también en http://astrocosmos.es]

Agradecimientos

Hoy me han preguntado si me arrepiento de no haber ido a China con el grupo de Shelios.

Me he parado a pensarlo un instante, más por lo inesperado de la pregunta que por otra cosa, y entonces, automáticamente, salió mi respuesta.

NO.

No hemos visto el eclipse, es cierto, y ellos sí. No tuvimos suerte. Todavía me entristezco al pensar en ese día, en la impotencia que sentí, que sentimos todos al ver que todas las probabilidades se esfumaban; aún se me humedecen aún los ojos al recordar todo el tiempo que pasé soñando con ese momento y siento que debe pasar demasiado tiempo todavía hasta que vuelva a tener la oportunidad de volver a ver algo similar.

Y, sin embargo, no vacilé en mi respuesta. Porque, a pesar de no haber visto el eclipse, no cambiaría por nada del mundo estas dos semanas de viaje. Porque, a fin de cuentas, el eclipse fue sólo la excusa para ir a visitar un país increíble, para compartir quince días de experiencias inolvidables con un grupo de amigos.

Me han preguntado también qué fue lo mejor del viaje, y ahí sí que no lo pensé ni un segundo.

Al menos para mí, está claro que, al final, los recuerdos que más tiempo permanecen en la memoria son los momentos, las risas compartidas con los amigos, las charlas, los detalles, el ambiente, en fin, todo eso que hace que el lugar en el que estás pueda no ser más que el marco perfecto para el encuentro, el broche final que no resulta tan importante como la compañía en la que te encuentras.

Lo mejor de todo este viaje, sin duda alguna, y aún teniendo en cuenta los lugares tan increíbles que visitamos, ha sido la gente. Y quiero agradecer a todos mis compañeros de viaje por haber contribuido a que haya sido realmente inolvidable. Cada uno de vosotros aportó su granito de arena personal al grupo, sin el cual nada habría sido lo mismo. Sin alguno de ustedes no habría sido igual.

Estos días, volviendo poco a poco a la monótona rutina del día a día, me encuentro echando de menos girarme y encontrar a alguno de ustedes ahí para comentar cualquier cosa, escuchar sus voces o ver de nuevo sus sonrisas. De verdad que me ha encantado compartir el viaje con todos ustedes, y lo repetiría sin dudar.

¡¡Muchísimas gracias!!

Para rematar, dejo por aquí algo que a buen seguro nos traerá gratos recuerdos a todos... ¡¡Espero verles muy pronto!!

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(Enlace al vídeo)
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PD: ¡No puedo evitarlo! Tengo que mencionar de forma especial a mi palmerita favorita. Sí, ya sé que no hace más que comer, dormir, quejarse y comprar carteras, pero qué le voy a hacer. Nunca olvidaré cómo se preocupó por mí los días que estuve malita, ni nuestras charlas hasta las mil, dormidas o despiertas, ni los momentos de complicidad y compañerismo. ¡¡Cariiiii!! Recuerda que siempre que vengas a Tenerife te tendré preparada la caseta del perro, eso sí, sin mantita y sólo si te portas bien... Jajaja ya sabes que es broma, un besote enooooorme y mil gracias por todo!!! Sabes que has sido de lo mejor de este viaje y creo que no hace falta que te diga que cuentas con una amiga más, para lo que sea ;) (Sí, Óscar, tú también has sido parte imprescindible del viaje, y sabes que has subido muchos muchos puntos en mi escala :P)


Itahisa

[Publicado también en http://itahisa.net/blog/]

Hangzhou: la Flor de Loto

Una de las cosas que sin duda fotografiamos en nuestro viaje fue la Flor de Loto, una planta imponente, con unas flores impresionantes y hojas enormes que cubrían las orillas de los pantanos y lagos en alguna de nuestras excursiones.

Concretamente, en Hangzhou el día 24 tuvimos oportunidad de ver muchos de ellos, incluso la lluvia de ese día nos permitió ver como las hojas se llenaban y vaciaban, meciéndolas sigilosamente. Sin embargo había una sorpresa más y es que ignoraba que las flores al perder sus pétalos dejaran en su parte central una figura caprichosa en forma de cono invertido que guardaba las preciadas semillas. Eso era lo que precisamente estaban vendiendo algunos vendedores ambulantes por la ciudad, cestos llenos de esa "perilla de ducha" como la llamaban nuestras guías que contenían decenas de semillas y es que la última sorpresa es que eran comestibles. Su sabor se aproximaba al de las castañas, muy ricas menos para Juanjo que por lo visto le dieron alergia...


Tanto Inés como Feli nos explicaron como se podían comer, nos invitaron a unas cuantas flores y pudimos verlo de cerca.

Había que sacar la semilla de la flor, una vez fuera había que cortar y tirar la cáscara que la envuelve, después había que abrir la "castaña" y quitar de su parte central un pequeño tallo verde muy amargo. Ahora solo faltaba comerla. La verdad es que nos gustaron e Inés se sorprendió, no esperaba que así fuera.

Por lo visto podía elegirlas en el momento de la compra y se fueron a por las más grandes, sin darse cuenta de que una de ellas estaba demasiado madura como para poder comerla. Aunque luego probé una y no estaba mal, pero me pareció buena idea guardarlas para intentar plantar alguna semilla a la vuelta en nuestra tierra.
La verdad es que no tenía ni idea de si era posible, si no lo era, si sería complicado, qué necesidades tenían de suelo, agua, temperatura... pero tenía que intentarlo así que guardé esas 11 semillas en mi cartera y proseguimos el viaje. Personalmente me parece muy interesante poder ver como nace una semilla recogida en China y llevada a nuestro país, es como un trocito de naturaleza autóctona, un recuerdo vivo que revivirá también nuestras aventuras. ¿Habrá suerte?

Manos a la obra

Ahora de vuelta, comienza el experimento. Me he informado por Internet y las semillas de Loto están bastanta bien consideradas en este mundillo, se venden a buen precio y según parece no es demasiado complicado cultivarlas con ciertos cuidados.
De momento, he metido una de esas bolitas (que habían reducido su tamaño y se habían puesto completamente marrones) en un tarro de cristal lleno de agua esperando que pueda germinar y ese tallo amargo de su interior brote y salga en busca de luz. Así lo hice y por lo visto es el método habitual, así que no voy mal encaminado.

En tan solo un día el tamaño de la semilla aumentó al doble (se llenó de agua por capilaridad) y ahora está luchando para salir del cascarón. Dicen que puede tardar hasta una semana así que habrá que tener paciencia.

Una de las curiosidades más llamativas con respecto a estas semillas es que según parece pueden aguantar varios cientos de años en su cascarón hasta el momento de ser plantadas. Se han encontrado semillas que han germinado con casi mil años de antiguedad. Sin duda, una maravilla.

Si la cosa sale bien, iré contando el paso a paso de esta segunda aventura, un trocito de China vivo, aquí en Madrid.

Ya hemos llegado

Todos de vuelta al hogar. El viaje terminó y ya no podremos enviar "crónicas en directo" desde el lugar de los hechos, pero en cambio tendremos acceso a este blog de manera individual, sin problemas de uso compartido del ordenador ni censuras estatales, y podremos subir nuestras impresiones personales, fotos y comentarios así que todavía queda tema para rato.

Juanjo


Los doce expedicionarios en el aeropuerto de Barajas

De vuelta a casa

Pues se acaba la aventura. Sobrevolamos Dinamarca en estos momentos y nos quedan poco menos de dos horas para llegar a la “Ciudad de la Luz”, la primera escala en un lugar europeo desde que iniciamos nuestro periplo asiático.

El motivo principal del viaje nos dejó un sabor agridulce, con ganas de intentarlo de nuevo en el futuro, pero el resto del viaje ha merecido la pena pese a ir como “señoritos”, durmiendo en buenos hoteles, traslados en autobús privado, sin hacer colas para obtener las entradas a los lugares que visitamos, facturando los equipajes desde la puerta de la habitación, comiendo en restaurantes exclusivos... no sé si habremos vivido la auténtica China, desde luego que no, pero si hemos conocido algo de este inmenso país, comiendo escorpiones en calles peatonales, “arriesgándonos” en restaurantes donde éramos la atracción de todo el servicio de camareros y la clientela, paseando por parques y mercadillos donde se nos quedaban mirando y nos hacían fotos por nuestra condición de occidentales. En fin, hemos tenido un poco de todo.

Pinceladas vagas de una cultura milenaria de la que casi todo nos suena a “chino” pero que nos incita a repetir la experiencia con las lecciones aprendidas. Tutelados por nuestra guía, “Feli”, que se ha convertido en una mas del grupo, aceptando nuestras bromas y exigencias, desviviéndose para que nos encontrásemos lo mas a gusto posible, hemos aprendido mutuamente acerca de la convivencia, las costumbres y la vida, que al fin y al cabo es la experiencia mas importante que quedará en nuestra memoria y el motivo por el que alargamos la expedición. Como para la mayoría, el eclipse, aún siendo el objetivo principal, no deja de ser una excusa para visitar un país al que no habríamos viajado de otra forma.

Volvemos pues con el morral lleno de experiencias, buenos momentos, diversión y la satisfacción de haber vivido unas vacaciones especiales en la otra esquina del mundo.

Juanjo Manzano
GOAT